Quesos del Mes de Febrero: Caramelo de Cabra Selección Alejandro Casielles

En la mayor mancha quesera de Europa y en el Paraíso de las vacas, también hay cabida para los quesos artesanales de cabra. Pero eso sí, no para cualquier queso caprino, para las piezas más selectas como el Caramelo de Cabra Selección Alejandro Casielles. Un queso asturiano que, a pesar de ser de tamaño pequeño para ser de Asturias, madura pacientemente durante 6 meses para darle ese carácter que parecería reservado a las piezas de gran tamaño. Estamos, por lo tanto, ante un queso excepcional seleccionado por nuestro maestro quesero como el Queso del Mes de marzo.

Y es que el Caramelo de Cabra Selección refleja la apuesta por la innovación del artesano Alejandro Casielles, quién ofrece un producto de valor añadido que conquista a los amantes de los quesos con personalidad y alma.

Queso Caramelo de Cabra, un pequeño con el alma y carácter de los más grandes

En el corazón del Paraíso nace un queso asturiano único. Un queso diferente al ser uno de los pocos quesos de cabra hechos en Asturias, tierra por excelencia de los quesos de vaca. Pero también una pieza singular por la personalidad, aroma, textura y sabor que le otorgan sus 6 meses de curación.

Porque el Caramelo de Cabra Selección es el resultado de una apuesta personal del quesero Alejandro Casielles por elaborar un producto respetuoso con las elaboraciones artesanales, tan arraigadas en nuestra tierra, pero con un carácter innovador. Un queso asturiano con valor añadido que comienza por una presentación diferente que, junto con el tipo de leche, le da nombre y resguarda un alma y carácter que, hasta la fecha, parecería reservado a los quesos de mayor tamaño.

Así es el Queso del Mes de marzo

Quesería: Alejandro Casielles 1913
Tipo de leche: cruda de cabra
Peso: 450 gramos
Corteza: natural, envejecida, lisa, pero con imperfecciones y tonos pajizos pálidos.
Pasta: compacta y ciega
Sabor y aroma: sequedad que, atemperado en boca, muestra el carácter graso de la leche de cabra, con retrogusto fermentado y sensaciones gustativas dulces. Olor a pasto seco y rebaño caprino.
Corte: quebradizo con apariencia levemente agrietada

Bajo un suave papel negro, enrollado a ambos lados con sendos cordeles rojos que conforman un caramelo, se esconde esta joya de Alejandro Casielles. Un queso asturiano que sorprende no solo por estar elaborado únicamente con leche de cabra, también por su pasta prensada, por la cuajada enzimática y una preservación del suero que le confiere una pasta dura y extracto potente en boca.

Pero sin duda, el aroma, sabor y presencia del Caramelo de Cabra viene determinado por el proceso de maduración. Una curación de 6 meses que da como resultado un queso asturiano con características organolépticas reservada para los grandes el Paraíso.

Si bien su corteza refleja el proceso de evolución del secado, su interior atesora un corte y maduración poco común en un queso 100% de cabra. Y es que su corte quebradizo y granítico recuerda a los quesos italianos o franceses, pero con ese toque único que solo tienen los asturianos y que nos traslada al verano. A esos escasos días de la época estival cuando la hierba está seca para evocar la sequedad del pasto, los tonos caprinos comedidos y las notas dulces con una acidez equilibrada gracias a su tranquilo y prolongado periodo de curación.

Para deleitarse con Caramelo de Cabra, es aconsejable emplear un cuchillo fino que permita la entrada en este queso de pasta dura. Así podremos obtener bastones discontinuos, rotos por la mitad. Un corte que permite percibir la intención y ver el alma de un queso artesanal innovador que surgiere sequedad antes de ser atemperado en boca y dar paso a su carácter graso y retrogusto fermentado.

Y nada mejor para acompañarlo que un vino rosado, como el Vitheras Lucía, que contrarreste su seco mordisco con el fresco, las notas florales y dulces de este Vino de Cangas DOP.