¿Por qué los quesos de Taramundi tienen sabor artesanal?

Taramundi es pionera en apostar por el mundo rural, la España vaciada y el turismo sostenible en una época que parecía que los pueblos y las tradiciones estaban destinadas a desaparecer. Gracias al esfuerzo de muchos, pero, sobre todo, de los vecinos y las personas que encontraron en Taramundi la tierra de paisajes, oficios y costumbres tan nuestras como la ganadería. Una actividad clave para su economía y para la Quesería de Taramundi que, además de dar la materia prima para la elaboración de sus quesos, explica por qué los quesos de Taramundi mantienen ese sabor singular de las elaboraciones artesanales.

Taramundi, tierra de oficios y tradiciones artesanales

Pocas presentaciones necesita un pueblo pionero en turismo verde. Tierra de oficios ancestrales, artesanía, costumbres, casas de piedra con tejados de pizarra y un paisaje reconocido como Reserva de la Biosfera.

Es la cuna de la quesería que lleva su nombre. Porque sin ese pasado de tradiciones y elaboraciones artesanales, los seis ganaderos de Taramundi que pusieron en marcha una quesería, ahora liderada por Ana Cotarelo, no habría llegado a lo que es.

Y no se nos ocurre una mejor manera de descubrir por qué los tres quesos artesanales asturianos elaborados por la Quesería Taramundi tienen ese aroma y sabor singular de las elaboraciones artesanales, que descubriendo su entorno privilegiado.

Taramundi, pioneros en sostenibilidad y turismo verde

Porque en Taramundi son pioneros en sostenibilidad en una época en la que pocos utilizaban este término. Un modelo que nació en los ochenta y que ha transformado esta zona de lo que ahora se conoce como la Asturias despoblada para llenarla de vida. Una apuesta por el turismo verde para mantener activo oficios como la ganadería, la artesanía, la actividad quesera, la cuchillería, etc.

Y es que Taramundi nos ofrece tantas opciones por descubrir que lo más complicado es elegir por cuál decantarse. Sus parajes naturales que la han convertido en Reserva de la Biosfera Oscos-Eo; con la Ruta del Agua, las cascadas o rincones pintorescos como Os Teixois; oficios con solera como el museo del Telar o el centro de artesanía de Bress y, cómo no, el placer de simplemente caminar por sus calles para deleitarse con su singular arquitectura.

Ruta del agua

Si eres un amante del senderismo, en Taramundi encontrarás opciones para todos los gustos. La más conocida es la Ruta del Agua gracias a un recorrido por verdes montañas, valles, bosques y castaños, en la que, además, te encuentras numerosos conjuntos etnográficos y hasta una cascada. ¡Un placer para los sentidos!

Puedes comenzar en distintos puntos. Si optas por Taramundi, a unos 250 metros del comienzo de la ruta puedes descubrir el mayor museo de molino de España, el Museo de los Molinos de Mazonovo, para continuar por el río Turia antes de llegar a una pequeña zona de carretera.

Eso sí, el paseo por asfalto bien merece la pena. Aunque tienes que desviarte un poco de la senda, descubrir la cascada Salgueira es una hermandad con la naturaleza, para continuar hacia Esquios y visitar el museo etnográfico para sorprenderse con utensilios y herramientas que hablan de la historia de esta comarca.

A continuación, debes afrontar una difícil decisión. Ir hacia la derecha camino a As Veigas o hacia la izquierda hacia Os Teixois. Decidas lo que decidas la Ruta del Agua siempre merece la pena.

Os Teixois

Símbolo de la hermandad que nos une con la comunidad vecina, podemos observar tanto hórreos como cabazos, además de adentrarnos en una de las arquitecturas hidráulicas más valiosas en todo su esplendor.

En proceso de restauración desde 1989, este Bien de Interés Cultural, permite inmiscuirse en los entresijos de la ingeniería a través del molino, rueda de afilar, batán y una pequeña central eléctrica. Una verdadera obra hidráulica.

Taramundi, el Paraíso de lo rural

Símbolo de la apuesta de Asturias por el turismo rural, por la población del rural y por mantener viva las tradiciones y oficios, Taramundi es el destino para aquellos que amamos la tradición y el paisaje y ese turismo que conecta con la zona y con sus costumbres.

Visitar el Hotel La Rectoral es mucho más que conocer la antigua casa del cura. Es ver el germen que activó el turismo rural en el concejo ya que, tras rehabilitar este edificio del siglo XVII, que fue el primer hotel rural de España, y ver el éxito obtenido, los vecinos decidieron rehabilitar sus viviendas y apostar por la conservación de molinos, abrir museos y conservar, entre otros oficios, la cuchillería tan reconocida en la actualidad.

Así, visitar Taramundi es recorrer sus calles para ir descubriendo las tiendas de artesanía, caminar hacia la parte alta del pueblo para ver el Carballo de Pollo, la estatua de madera de un roble plantado en 1584, descubrir la estatua de la Iglesia San Martín, adentrarse en el proceso de elaboración de su famosa cuchillería y cómo no el Castro que fue el epicentro del comercio en la época romana.

Es descubrir una apuesta por lo nuestro, por lo de siempre, por el entorno y por el rural que se manifiesta en su paisaje, su gastronomía, sus gentes y, claro está, en sus quesos. Unos asturianos elaborados por la Quesería Taramundi que nos recuerdan el sabor único y extraordinario de las elaboraciones artesanales.